Esta
entrada trata de explicar de forma somera la antigua polémica sobre
el nombre de este río. Aunque el origen del término “Serpis”
muestre muchas dudas al final ha sido el
nombre del río que ha prevalecido.
El
actual río conocido como Serpis nace justo a la salida de la ciudad
de Alcoy como unión de los ríos Molinar y Riquer*. Discurre por la
comarca de El Comtat, atraviesa la sierra de La Safor y
desemboca al mar Mediterráneo en Gandía. Su denominación original
fue la de río Alcoy pero, a mediados del siglo XIX, a causa de
ciertas interpretaciones y suposiciones basadas en fuentes históricas
fue definitivamente tomando protagonismo el nombre de Serpis hasta casi desaparecer
el nombre inicial de río Alcoy.
*
El río Riquer tiene por afluentes el Barchell y el Polop, que se
unen antes de entrar en la ciudad en la “Font del Quinzet”.
Algunos autores y planos consideran al río Barchell como el curso
principal del río que atraviesa el casco urbano de Alcoy recibiendo
los afluentes Uxola y Benisaidó, y omitiendo el nombre de Riquer.
Imagen
del valle de El Comtat
Imagen
del río por Lorcha
Imagen
del río atravesando la sierra de La Safor (Racó del Duc).
Río
Alcoy
En
los primeros escritos, textos de archivos y mapas el río toma el
nombre de la ciudad donde se origina, es decir, “Río Alcoy”.
Entre estos textos y mapas se podrían enumerar por orden
cronológico: “Segunda
parte de la decada primera de la historia de la insigne y coronada Ciudad y Reyno de Valencia”
(1611) de Gaspar Escolano, “Célebre
centuria que consagro la ilustre y real villa de Alcoy...”
(1672) de Vicente Carbonell, “Novissima
et Accuratissima Tabula...” (1710) de Reiner
y Josua Ottens, “Mapa
geográfico del Reyno de Valencia. Dividido en sus trece
gobernaciones...“
(1788) de Tomás Gómez, “Observaciones
sobre la historia natural, geografia, agricultura, poblacion y frutos
del Reyno de Valencia”
(1797) de Antonio José Cavanilles, “Diccionario
geográfico-estadístico-histórico de España y sus posesiones de
Ultramar”
(entre 1845 y 1850) de Pascual Madoz, “Guía
del forastero en Alcoy”
(1864) de José Martí Casanova...
Fragmento del mapa “Novissima et Accuratissima Tabula...” (1710) de
R, & I. Ottens © Instituto Geográfico Nacional de España
Río
Serpis
A
partir del siglo XVI algunos historiadores con el afán de buscar los
antecedentes de pueblos y accidentes geográficos de nuestra región
intentaron interpretar los escritos de los antiguos autores griegos
y romanos. Entre estas fuentes clásicas se encontraban la Geografía
de Claudio Ptolomeo, el Periplo de Avieno, “De situs orbis”
de Pomponio Mela, el Itinerario de Antonino, Estrabón, Plinio...
Hay
que indicar que estos primeros autores a veces no coincidían.
Existían diferencias tanto de situación como en el nombre de los
mismos topónimos. Estos nombres podían ser totalmente distintos o
con pequeñas variaciones creando bastante confusión, como
consecuencia de si se refería al término íbero o al atribuido por
los primeros colonizadores. También existían variedades idiomáticas
y diferencias en la traducción del griego y el latín. Para el caso de
Játiva aparecen las siguientes variantes: Saetabis, Saitabis,
Setabim, Sérabis, Sétabis, Sorobis...
Concretamente
en la Geografía de Ptolomeo se indicaba que el Saitabis Fluminis
Ostia (río de Játiva cuya equivalencia actual sería el río
Albaida) desembocaba directamente en el mar Mediterráneo, sin
embargo, como se puede fácilmente comprobar este río es un afluente del
actual Júcar (antiguamente conocido por Sucro).
Parte
del mapa “Hispaniae Veteris
Descriptio”
(1586) de Abraham Ortelius basado en la Geografía de Ptolomeo donde
se puede apreciar errores de situación. ©
Instituto Geográfico Nacional de España
El
primero de los historiadores que trató sobre este tema fue el padre Pedro
Antonio Beuter en su obra “Primera
part d'la Historia de Valecia que tracta deles antiquitats de Spanya
y fundacio de Valecia
...”
(1538). Interpretó que el río Sérabis
nombrado por Pomponio Mela que desembocaba entre el Júcar y el cabo
de San Martín (Jávea) por la zona de la actual Gandía, era el río
Alcoy y había derivado el término de Sérabis
a Serpis.
Este
último término se difundió y fue utilizado de forma vulgar en los
siglos XVI y XVII pero sólo en ambientes populares sin llegar a
reflejarse en ningún texto o plano. En
el siglo XVIII cayó en desuso para volver a aparecer en el primer
tercio del siglo XIX. Concretamente, en 1835, en la Embajada de las
fiestas de moros y cristianos de Alcoy, tal vez buscando la épica
historicista y la erudición, se cita entre los versos para referirse
al río de Alcoy.
Generalización
Se
puede decir que el nombre de “Serpis”
lo oficializó Pablo Coello en 1859 en el “Atlas de España y
sus posesiones de Ultramar”,
conjunto de mapas que completaban la publicación de la magna obra
“Diccionario geográfico-estadístico-histórico de
España y sus posesiones de Ultramar”
de Pascual Madoz. Tanto en el mapa provincial de Alicante como en el
de detalle de la población se indica ya el nombre de “Serpis”, a
pesar de que en todas las entradas referentes a este río en el
Diccionario de Pascual Madoz sólo emplea el término “río Alcoy”.
Este atlas contribuyó a su difusión en todo el ámbito
nacional. Posteriormente la aparición de publicaciones como el
periódico “El Serpis” en 1878, así como de otras marcas,
empresas y negocios, consiguieron su generalización y uso común.
Parte
del mapa de Pablo Coello de la provincia de Alicante © Instituto
Geográfico Nacional de España
Plano
específico de Alcoy de Pablo Coello © Instituto Geográfico
Nacional de España
Una
vez normalizada su utilización, conforme los estudios arqueológicos
e históricos avanzaban, surgían dudas respecto a la certeza de su
origen por lo que aparecieron nuevas justificaciones, alguna de
ellas bastante artificial como que “Serpis” procede de Sierpes
o del término latino vulgar Serpes que significa “serpiente”,
por lo serpenteante y ondulante del curso de este río. Entre otras teorías se
podrían citar las siguientes:
“...
que hoy está demostrado que Sétabis es río de Játiva y Sérabis
el río de Alcoy, y que no hay dificultad en admitir que el antiguo
Sérabis es el moderno Serpis, primeramente porque Serpis conserva el
acento tónico de Sérabis, que es la primera condición exigida en
la derivación de los lugares romanos; en segundo lugar porque en
virtud de la llamada ley del “menor esfuerzo”, muy frecuente en
la evolución morfológica de la lengua valenciana, por la cual caen
las vocales postónicas al pasar la palabra del latín vulgar al
valenciano, se explica la desaparición de la a postónica de Sérabis
convirtiendo la palabra en Serbis y como la otra ley eufónica
reclamaba el cambio de la labial b en su fuerte p, tenemos a Sérabis
convertido en Serpis; y en último y principal término por la
situación geográfica, puesto que en los mencionados autores y
especialmente el español Pomponio Mela, según la interpretación
del valenciano Beuter, ponen la antigua desembocadura del antiguo
Sérabis entre el Júcar y el cabo San Martín que es donde desemboca
el actual Serpis....”
“...Serpis
vienes de Serapis (dios de la salud). Estas montañas, cuyo centro es
el monte Mariola, que alimenta las fuentes origen de nuestro río,
tuvieron en la antigüedad gran fama de salutífera y abundantes en
yerbas medicinales, y de ahí se llamaría Serapis el río que en
ellas nace, y por simple desaparición de la a postónica, Serpis...”
Imagen de la comarca de El Comtat.
Con
el paso del tiempo debido a multitud de factores: utilización de un nombre
exclusivo para el río, su sonoridad, su origen erudito,
la opinión autorizada de personas del ámbito arqueológico
(incluso extranjeras) y del lingüístico, su uso continuado, la
dificultad de rectificación...provocaron la adopción definitiva del
nombre casi anulando el término original.
Como
comentario final señalar que un caso algo similar ocurre
con el nombre del puente de la vía verde de Alcoy mal conocido como “de las
siete lunas”. Tras los numerosos años en que se ha estado
utilizando erróneamente este nombre y a pesar de su razonada explicación que no
deja lugar a dudas de que se trata de un puente caminero anterior
(además de que tiene 8 arcos), se continúa usando. Es muy difícil detener su difusión y su rectificación; numerosas publicaciones,
carteles explicativos, el actual internet, las redes sociales... Su verdadero
nombre es “de Polop”, tal como lo bautizó el autor del proyecto del
viaducto, eso sí es menos glamuroso
y no casa mucho con el magnífico puente.
“Una
mentira repetida muchas veces se convierte en verdad”
Nota
Bibliográfica:
Esta entrada está basada principalmente en “El Archivo de Alcoy” de
Remigio Vicedo Sanfelipe y mapas extraídos del Instituto
Geográfico Nacional.
Dado el número de entradas y la variedad de algunos temas, para una mejor visualización y localización, recomiendo la consulta del Índice (pestaña superior derecha)
Dado el número de entradas y la variedad de algunos temas, para una mejor visualización y localización, recomiendo la consulta del Índice (pestaña superior derecha)
Bon dia. Una preguta: si se puede saber donde puedo encotranr la información que de veracidad a está frase. Porqué si no ha dejado nada escrito, cómo se puede saber que el pueblo lo nombraba de otra manera que Riu d'Alcoi. Te dejo constancia del texto del cual te hablo: Este último término se difundió y fue utilizado de forma vulgar en los siglos XVI y XVII pero sólo en ambientes populares sin llegar a reflejarse en ningún texto o plano.
ResponderEliminarPara realizar esta entrada me basé en el libro “El archivo de Alcoy” de Remigio Vicedo Sanfelipe que pude localizar en la biblioteca de la Universidad de Alicante. No recomiendo la lectura de este libro pues aparecen varios fragmentos de opiniones sobre este tema de varios autores (Remigio Vicedo no los identifica a propósito) y queda muy lioso. La afirmación de que “fue utilizado de forma vulgar en los siglos XVI y XVII pero sólo en ambientes populares sin llegar a reflejarse en ningún texto o plano. En el siglo XVIII cayó en desuso para volver a aparecer en el primer tercio del siglo XIX.” la tomo de uno de estos autores. Creo que es posible esta afirmación pues con el habla vulgar y el paso del tiempo explica la derivación del nombre de Sérabis a Serpis, y el hecho de que apareciera en la embajada de 1835 sugiere que era conocida en el ambiente popular.
ResponderEliminarPido disculpas por la tardanza en la contestación pero no me he dado cuenta hasta hoy del comentario.