lunes, 15 de mayo de 2017

Importancia de los puentes en la evolución urbana de Alcoy (II). Siglos XX y principios del siglo XXI

Puentes del siglo XX

    A principios de siglo XX, con motivo de la construcción de la carretera de 3º Orden de Alcoy a Callosa d’Ensarrià, se levantó el Viaducto de Canalejas, lo que permitió la cómoda comunicación con el lado opuesto del casco urbano, así como la mejor urbanización del barrio del Tossal y la ampliación de la calle Gonzalo Barrachina.

Como se ha señalado en la entrada anterior, dentro del Plan de Ensanche y Rectificación de Alcoy de 1.878 estaban previstos dos puentes para comunicar el casco urbano con la 1ª y 3ª Zona de Ensanche. Primero se ejecutó el puente de comunicación con la 3ª Zona de Ensanche que fue el puente de San Jorge o Pont Nou, dada la acuciante necesidad de acortar las distancias del casco urbano con esta zona del ensanche y las estaciones de ferrocarril de Játiva y de Gandía. Su construcción se inicio a finales de 1.925 y se terminó en 1.931. Para mejorar la unión del casco urbano con la 1ª Zona de Ensanche se ejecutó el pontón de San Jaime o del Terrer entre 1.927 y 1.933. De esta forma, el centro de la ciudad y las zonas periféricas quedaron comunicadas a un mismo nivel, quedando en las orillas de los ríos las zonas industriales.

Vista centro urbano. Puente San Jorge y Viaducto

Con el puente de San Jorge se inició la famosa y tradicional “Volta als Ponts”, típica costumbre alcoyana de paseo los fines de semana. Se trata de un recorrido circular de 2,5 km de longitud y de poca pendiente que pasa por el centro de la ciudad y atraviesa los puentes de Cervantes, San Roque y San Jorge.

      El puente de la Pechina perteneciente a la antigua carretera de Alcoy a Játiva, estaba situado en el extremo de la 3ª zona de Ensanche, al Norte de la ciudad. Daba comunicación a la estación de Gandía (1892) , a la estación del Norte del ferrocarril a Játiva (1904), al matadero municipal (1911 a 1926) y a la plaza de toros (1.926). Por lo que poco a poco fue adquiriendo más importancia y presencia dentro del entramado urbano. Ya aparece el trazado de las primeras manzanas a partir de este puente en el plano de Alcoy de Figueras Pacheco, fechado en 1.912. Este nuevo espacio urbano se fue consolidando tomando el nombre de “Zona Norte”.

Vuelo fotogramétrico 1.945-46 Americano Serie A sobre Alcoy (Fototeca digital del Instituto Geográfico Nacional). Se puede apreciar la plaza de toros al lado del puente de la Pechina. Se distingue en la esquina superior izquierda el trazado del inacabado ferrocarril Alcoy a Alicante.



     Tras todo lo anterior, se puede considerar que los primeros grandes puentes de Alcoy tuvieron un origen caminero, exceptuando los puentes de San Jorge y del Terrer. Se construyeron a las afueras de la población. En los sucesivos planes de ensanche tuvieron mucha relevancia. Se tomaron como puntos de referencia, tanto en las alineaciones como en las cotas. La visión de futuro de sus proyectistas, así como su cuidado diseño y construcción permitieron su integración en la trama urbana sin ningún problema, como si hubieran sido concebidos desde un primer momento dentro de la ciudad.

Vista actual y general de Alcoy, con la larga Avenida de la Alameda en el centro.


       Ya en los años 80, dada la dificultad de aumentar la anchura de los puentes Cristina, San Roque y Pechina con cuatro carriles para dar una mayor capacidad de circulación a la N-340 en su travesía por Alcoy, el pleno del Ayuntamiento de acuerdo con la Jefatura de Obras Públicas dispuso un desdoblamiento de la misma por las calles Santa Rosa, Entenza y Gabriel Miró. Como obras complementarias habría que realizar un terraplén en el barranco de Benisaidó (La Vaguada) , la ampliación de los tableros de los tres puentes de fábrica y la construcción de uno nuevo en la prolongación de la calle Santa Rosa. Como consecuencia de esta última necesidad se proyectó el puente de Fernado Reig, con lo que se consiguió, aparte de darle una mayor fluidez al tráfico interurbano, mejorar la comunicación con el barrio de Batoy y la carretera C-3313 de Onteniente a Callosa.

Puente Fernando Reig


Puentes del siglo XXI

Años más tarde (2.004) se realizaron mejoras en las comunicaciones entre los barrios cercanos a la falda del Monte San Cristóbal aprovechando la antigua explanación del inconcluso ferrocarril de Alcoy a Alicante. Estas obras formaban parte de un ambicioso proyecto de nuevo bulevar al noroeste de la población para unir los barrios de Santa Rosa y la Zona Norte. También permitirían el desvío del tráfico de la calle Entenza. En los inicios se llevó a cabo el acondicionamiento y ensanche del puente del ferrocarril sobre el Barranquet de Soler (puente Guitarrista José Luis González) para el paso de vehículos en ambos sentidos y la construcción de un nuevo puente sobre el barranco de Benisaidó denominado Rafael Terol Aznar (Ensanche – Zona Renfe). Sin embargo, este proyecto de bulevar quedó paralizado en el tramo intermedio.

Puente de Rafael Terol

Para terminar, mencionar el puente de Francisco Aura Boronat, sobre el río Serpis, ya contemplado en el plan de Ensanche de 1.957. Fue inaugurado a principios del año 2.014 para mejorar la comunicación del centro de la ciudad con los barrios Zona Norte, Cotes Baixes y el Hospital Virgen de los Lirios (Zona Nord – Viaducte). Al mismo tiempo, también se llevó a cabo otro puente de menores dimensiones sobre el barranco de Trencacaps denominado puente de Pep Linares. De esta forma se dotaba de una nueva vía de acceso a los barrios de Santa Rosa (por el camí vell de Batoy) y de Batoy (calle Montcabrer), que hasta la fecha solamente se comunicaban por la carretera CV-795 a Bañeres.

Puente Francisco Aura Boronat


Puente Pep Linares

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